De la Estación de Madrid salía un ramal del ferrocarril que llegaba hasta las estaciones clasificadoras de mercancías ubicadas frente al Postiguet, y que permitía que los vagones se cargaran y descargaran en el Puerto. Asímismo, también posibilitaba unir las vías de la Estación de Benalúa y la de Madrid, para el trasiego de los trenes.
Esta vía descendía paralela al Barranco de Benalúa, que bajaba por donde hoy está la Avenida de Óscar Esplá.

Hasta que no se desarrolló el Ensanche, no hubo muchos problemas, y la convivencia fue fácil. Pero en cuanto apareció en escena el vehículo privado, el cruce de Maisonnave se hizo muy conflictivo. Aquí pasaban trenes, tranvías de regreso desde Benalúa hacia el centro, y todo tipo de vehículos (especialmente camiones que iban a las industrias y almacenes de la zona).
Los vecinos del barrio, tuvieron que sufrir durante décadas las paradas en el paso a nivel.


Gracias a nuestro amigo, don Jaime Pomares, hemos dado con una maravillosa y desconocida fotografía que nos muestra este lugar, y parte de Benalúa, en una fecha perdida entre los años 50 y 60.

Está tomada desde uno de los edificios que se levantan frente a la entonces "Estación de RENFE". En esta fotografía podemos ver las vías que descendían por Maisonnave, y el cruce, con un guardia de pie, una típica estampa urbana.

En primer plano vemos a mano derecha el conjunto de los preciosos Pabellones de Ferroviarios, con la valla perimetral (de la que queda todavía un tramo), y con un estado formidable.
Tras ellos, en el lugar que hoy ocupa el Teatro Arniches y el edificio de la Generalitat Valenciana, aparece, según nuestro amigo Elkiko, una fábrica de aceites (que por cierto, tenía mucho arbolado en su patio).
Este edificio lindaba directamente con el puente sobre el que pasaba esta carretera de Madrid (Avenida de Aguilera), pero desafortunadamente, no podemos verlo en la imagen.

En el horizonte de la foto, si fuera a color, podríamos ver un mar brillante bajo el sol alicantino. Que era el telón de fondo de toda la escena urbana de Benalúa.

Y, dentro del barrio, distinguimos estos edificios singulares:

• Chalets de Foglietti: es la primera foto que tenemos de este conjunto. Sus jardines presentaban árboles de gran porte, y las viviendas tenían todas un estilo similar, con cubiertas a cuatro aguas de teja.
• Chalet de Prytz: el más grande y espectacular de todos. La fortuna de esta familia se reflejó en la construcción de esta vivienda en un lugar privilegiado.
• Edificio de Aguas de Alicante: probablemente el conocido como Chalet de Aguas de Sax. Hoy el único que permanece, en un estado formidable, pero sin ser visitable.
• Central Telefónica: al cruzar de lado a lado de la manzana, vemos su fachada recayente a Isabel la Católica. Se trata de un edificio diseñado en Madrid, y ejecutado por Miguel López, con una fachada racionalista y modulada de gresite negro.
• Complejo Industrial: desconocemos a qué se destinó este enorme edificio (hubiera sido maravilloso poder legarlo al futuro como una gran dotación pública). Seguramente era una industria sencilla o unos almacenes. Su enorme lugar lo ocupó una promoción de edificios monótonos propia de los años 60-70.